Sin lugar para las apariencias (Maeve)

Una vez más me encontraba en ese oscuro lugar, la antesala de Vaudiz, solo que esta vez, por decición propia. Me había dado cuenta que en este lugar podría practicar mis poderes sin interrupciones y además, de vez en cuando encontrarme con alguien de Vaudiz. Y esta, fue una de aquellas veces. La pequña figura se acercó con paso tranquilo, mas con sus toques de elegancia y danzarinos. Yo la conocía muy bien, y no sabía si alegrarme o aterrorizarme al ver al pequeña Maeve arrastrando su oso de felpa detrás de ella.

Nuestras miradas se cruzaron. Para mí, que una persona de Vaudiz me míre,me causa una serie de sentiientos terribles. Pero que una lectora de almas te mire, puede ser algo terrible para cualquier persona. Puede ver todo sobre tí, tus sentimientos, deseos, miedos y culpas. Todo lo bueno y malo de una persona. En cuanto sus ojos verdes se posaron en los míos, supe que ella ya sabía todo. No sabía si apartar la mirada y salir corriendo de ahí. Lo único que pude hacer fue susurrar su nombre y tatar de sonreír, aunque sabía que las apariencias no cambiarían nada, en ninguna de las dos.